domingo, junio 30, 2013

La dama duende


No puedo recomendar lo que vimos anoche en el Festival de Teatro Clásico de Cáceres. Una dama duende de dos horas y media con algunos actores televisivos que terminaron la representación casi afónicos, de tanto grito. Sin ritmo —apagado por numerosas y dilatadas mutaciones—, despojaron la propuesta escénica de Calderón de toda trascendencia. Difundida como un homenaje de Cáceres —sic— al desaparecido gran Miguel Narros, esta representación ha pasado con más pena que gloria —tampoco lo pretendían— por aquí, por donde ya pasó antaño una mejor  La dama duende en una de las primeras ediciones del festival —creo que de José Luis Alonso—, que no duró tanto. Tampoco otra más reciente —que aquí no vimos— de Gabriel Garbisu de hora y media y pico. Y es que anoche, por dilatar, hasta el colofón fue largo, sin razón justificada. Es una lástima que se desbaraten así aciertos en otros lados como la escenografía y sus posibilidades, o determinados gestos en la dirección de actores..., para casi nada. Lástima.

No hay comentarios: