martes, enero 30, 2007

San Augusto

"Hoy me siento bien, un Balzac; estoy terminando esta línea."

Augusto Monterroso, "Fecundidad", en Movimiento perpetuo.

jueves, enero 25, 2007

Alcaíns


Uno de los creadores más singulares y de mayor calidad e interés de los que por aquí campean, Javier Alcaíns, lleva unos meses solicitando apoyo a diferentes instituciones para exponer sus libros iluminados y caligrafiados. Di cuenta aquí el 29 de diciembre de 2005 de su página web y ahí puede comprobarse lo que hace.
La Diputación Provincial de Cáceres sustenta su proyecto ofreciéndole su espacio y aportando algo del dinero que necesita para poder editar un catálogo digno que muestre sus creaciones.
Publicó hace tiempo un libro de poemas y un libro de relatos en una incipiente, en aquel momento, colección "La Gaveta". Tengo en casa una copia de uno de sus libros ilustrados, Arquitectura melancólica, sobre el que quiero escribir lo mejor que pueda. Y, de verdad, merece la pena apoyar su proyecto. A los responsables de la cultura de algunas instituciones públicas, les digo que vean y que lean lo que hace Alcaíns. Me consta. A los que mandan en las entidades financieras, sólo que pregunten —sin necesidad de leer ni ver— si les interesa; y que procedan.
Los textos de Javier que ahora leo se postulan como de ingenua imaginación y piden una lectura ingenua. Yo, para esto, no pido que sea ingenua la lectura de la interesante obra —y más tiempo al tiempo— de Javier Alcaíns.

miércoles, enero 24, 2007

Grande-Marlaska

Esta mañana, en Música es Tres, de Radio 3, han captado mi atención las referencias a la página de música libre dpop.es, marca de nuestro tiempo y objeto de reflexión sobre los nuevos modos de editar y consumir música. En ella, encuentro noticias de muchos grupos actuales. No sabía que el grupo indie madrileño "Garzón" había cambiado de nombre, y ahora -creo que desde el verano pasado- se llama "Grande-Marlaska". Al parecer, el magistrado requirió al grupo "cesar en los actos que constituyen una intromisión en su imagen", aun cuando todo era en homenaje, y sus componentes decidieron rebautizarse. Pop fresco y con ideología.

jueves, enero 18, 2007

Contra el olvido, de Paco Espinosa


Como nos traemos entre manos que no se olvide la figura de un escritor republicano del exilio, nacido en Cabeza del Buey en 1905 y muerto, "de nostalgia y lejanía", en Francia en 1970 —Antonio Otero Seco—, ayer aprovechamos para estar juntos Paco Espinosa y yo, porque se presentaba en Cáceres su último libro, Contra el olvido. (Barcelona, Crítica, 2006), que hoy se presenta en Badajoz.
Es un libro bien hecho, de lectura muy provechosa. Conocía algunos trabajos, pues Espinosa recoge en él textos publicados en diferentes lugares desde 1999 hasta 2006, y por mi hermano José María o por el mismo Paco Espinosa he dispuesto de copias en estos años. Alguno, y de extraordinario interés, como el referido a García Atadell, ha permanecido inédito hasta ahora. Otro, que fue un libro publicado en Del Oeste Ediciones en 2005, El fenómeno revisionista o los fantasmas de la derecha española, se republica aquí por manifestar protesta ante una situación lamentable, y que, como amigo de los editores, me incomoda más.
Mi hermano escribió en su blog el 26 de septiembre del pasado año sobre este libro necesario. Acababa de recibirlo. Ayer, en Cáceres, se puso de manifiesto la necesidad de libros como éste, y el interés que suscitan. El Salón de Actos del Colegio Mayor Francisco de Sande estaba lleno.
Lleno también de reivindicación, de memoria y de historia —a la vez—, de expresión emocionada del recuerdo, y de la injusticia, de vehemencia, de boba inmodestia hinchada de quien se vocea a sí mismo, también.
Dos apuntes, uno trascendente y otro ligero. El primero: el interés por la historia y la reivindicación del rigor en el ejercicio de la misma, una vez más, se miden en función de la cercanía con respecto a nosotros. Luego, nos da igual que si Felipe II... Al contrario, lo convertimos en best-sellers. El segundo: que en la tarjeta de presentación del libro de Espinosa, la reproducción de la cubierta recogía como subtítulo el Lorem ipsum de pruebas. Lo que no debe llevar a engaño: Historia y memoria de la guerra civil.

sábado, enero 13, 2007

El pensamiento de Miguel Casado


No es lo más destacable que días antes de recibir este libro estuviese escribiendo sobre la poesía de Olvido García Valdés, no. Quizá lo sea que hacía horas que había recibido el saludo de una antigua alumna, inteligente arabista, acompañado del recordatorio del centenario de Yalal al-Din Rumi (Balj, 1207), y a la que contesté con una pregunta sobre el motivo poético del pájaro cautivo. Y también puede ser destacado que este libro esté incluido en una colección tan elegante como “Papeles del Aula Magna” del consanguíneo Servicio de Publicaciones de la Universidad de Oviedo, una colección en la que se han editado textos de Habermas, Said, Bryce Echenique, Sábato, Miguel Herrero de Miñón, Margarita Salas, Josep Fontana, y, entre otros, Olvido García Valdés.
Y es que Deseo de realidad recoge tres textos de Miguel Casado. El primero de ellos, “Apuntes del exterior: poesía y pensamiento”, que fue una conferencia impartida en la Universidad de Oviedo en junio de 2006, arranca con la reafirmación de una imagen de raigambre, si no superrealista, bretoniana: la de que la experiencia está confinada en una jaula. Y esta jaula es un punto de partida muy sugerente para una reflexión —una más— sobre todo lo que supone la escritura de salto sin red y de riesgo y vértigo no sometido a razón limitada. Escribo esto varado —y asimilando— en la página 44, sin entrar aún en los otros dos ensayos sobre poesía y política y sobre la traducción. Altura. La del pensamiento de Miguel Casado. Una alegría recibirlo.

viernes, enero 12, 2007

Los Angeles Galaxy

Desde la comparecencia de José Luis Rodríguez Zapatero, Presidente del Gobierno, en la que comunicó la decisión de retirar las tropas españolas de Irak, no había visto mayor prueba de coherencia hasta ahora, que comparece David Beckham para informar sobre su decisión de marcharse junto a su señora Victoria Adams a Hollywood.

domingo, enero 07, 2007

Cuenca


Fue un buen regalo de Reyes visitar Cuenca. Las dos. La Cuenca alta y la Cuenca baja. No se comunican, me parece, entre ellas. Es como si no se conociesen, no sé. Quizá sea la imposición orográfica, lo alto y lo bajo, y que los contrastes de otras ciudades aquí se agudizan, como la ciudad de más acá del río y la de más allá. En otros lugares no pasa eso. Nosotros vivimos durante tres días y pico en la parte de arriba, y veíamos a una gente que no se correspondía con la de abajo. Arriba, la Fundación Antonio Pérez y su impresionante colección, y el Museo de Arte Abstracto. Abajo, la Cabalgata de Reyes y las colas en las tiendas de ropa porque habían empezado las rebajas antes que en otros sitios. Luego, las torcas, la serranía y el nacimiento del río Cuervo, y en Vega del Codorno una excelente comida, "donde no bajan ni las águilas", nos dijo el dueño del restaurante, que nos mimó, precisamente por eso.
Ya en casa, tanto... Poner orden en todo, libros y más libros, papeles, la sorpresa de leer el blog de Gonzalo Hidalgo con el fondo musical de los tonos más chulos para bajarse, estridentes, Shakira y más, y Kafka en la orilla, y volver a comer escuchando a Ramón Trecet, que dedicó unas palabras bien pronunciadas a Pernando Barrena y Arnaldo Otegi sobre la indignidad desde un punto de vista humano ante los últimos acontecimientos, y los mejores deseos de la gente más cercana, y un nuevo encuentro con la necesidad de tomar una determinación ante lo que algunos llaman perder el tiempo en leer a los amigos y no poder hacerlo con Thomas Mann en español, o con don Miguel, o don Benito... En fin, saludos de nuevo.

martes, enero 02, 2007

Píos deseos al empezar el año

Pasada ya la cumbre de la vida
justo del otro lado, yo contemplo
un paisaje no exento de belleza
en los días de sol, pero en invierno inhóspito.
Aquí sería dulce levantar la casa
que en otros climas no necesité,
aprendiendo a ser casto y estar solo.
Un orden de vivir, es la sabiduría.
[…]
En estas horas tranquilas de la noche leo el poema de Jaime Gil de Biedma. Me acuerdo de él en estas fechas, y a él acudo. Tengo tantas cosas que decir, de otro modo, mejor...