Evoca Antonio Gómez en el prólogo ("¿Qué escriben los poetas extremeños —desconocidos— de ahora?") a esta antología, Trece (Cáceres, Rumorvisual, 2010), aquella de 1983 que ideó Ángel Sánchez Pascual a partir de las lecturas en el aula poética de la cacereña Institución Cultural "El Brocense" de doce poetas extremeños nacidos entre 1955 y 1964. Es decir, los mayores tenían 27 años y los más jóvenes 18, que eran Diego Doncel y Pablo Nogales. En ésta que acaba de publicarse, y que se presentó el viernes 26 de marzo en el café La Machacona de Cáceres, hay menos cercanía cronológica, pues hay autores, los más jóvenes, de 25 años, y otros que ya han cumplido los cuarenta. Sin embargo, tienen en común con aquellos su bisoñez, es decir, que casi todos son escritores noveles sin obra publicada en libro. Casi todos, pues hay excepciones, como la de Santiago Tobar, del que conozco su Cáceres-Manhattan (Cáceres, 2008), que es varios libros en uno.
Creo que la evocación de la antología de Sánchez Pascual —muy diferente a ésta— puede ir más allá. En su introducción había una referencia a la fecha en que leyó en Cáceres sus poemas José Hierro: el trece y martes del mes de octubre de 1980. La mención parecía conjurar la superstición con una relación directa entre la fecha y la buena fortuna de poder publicar los versos de doce poetas casi inéditos. El correr del tiempo ha confirmado a la mayoría de aquellos autores, lo que añade mejor fortuna. Algo de esto han podido pensar los promotores de Trece, que reúne a trece poetas que escriben trece poemas cada uno, el último con el pie forzado del número 13 como objeto. Son Alonso Torres, Ana Flor Redondo, Manuel Checa, Javier Búrdalo, Patxidifuso, María Carvajal, Santiago Tobar, Victoria Mera, Valentín Valle, Miguel Méndez, Rafael Marchena, Nuria Cepeda y Carlos Ortiz.
La iniciativa es encomiable. Por su independencia, por su frescura y por sus razonables pretensiones. Quiero decir que creo que saben estos autores dónde están y con qué planteamientos expresan la necesidad de escribir; y algunos de sus poemas insisten en ello. Los resultados irán llegando conforme se prolongue esa tarea constante de medirse con las palabras. Se me permitirá la licencia de citar a dos de las cuatro mujeres incluidas, la más joven y la menos joven. En los textos de ambas encuentro valores: una mirada más madura —perdón por la obviedad— en Ana Flor Redondo; y unos intencionados rescoldos de lectura, precisamente, en la autora más joven, Victoria Mera, unos motivos literarios que, sin embargo, no son visibles en general entre los 169 poemas de este volumen.
Un último apunte: la poesía invisible de Javier Búrdalo (Cáceres, 1969). La selección de sus textos remite, al menos, a una decena de libros, de poemarios, escritos entre 1993 y 2008, y curiosamente, aquí ordenados en orden cronológico inverso, desde el más reciente al más antiguo, más el poema último, el del 13, fechado en diciembre de 2009. Un descubrimiento que da sentido al libro, a la intención de Antonio Gómez en el prólogo y al significado del epígrafe de Luis Felipe Comendador que lo preside: "Si mi poema no lo lee nadie... ¿es poema?".
sábado, abril 03, 2010
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5 comentarios:
Me sorprende la ausencia de poetas jóvenes extremeños como José Manuel Díez, Luis Darío, Julio César Galán, Daniel Casado, Mario Lortau que ya han obtenido reconocimiento con premios y publicaciones. Qué criterios usa el antólogo? dónde se puede adquirir el libro?
Tenía que haber dicho que se trata de una antología espontánea, sin afanes programáticos, sin antólogo... Se trata de una reunión de gente que escribe sus poemas, y que no están en la arena literaria. No hay que responsabilizar a nadie por las ausencias; y sí, en cualquier caso, alegrarse por las presencias. Por cierto, bien por los autores citados, Anónimo.
El libro puede adquirirse en la página www.rumorvisual.com.
Yo lo he comprado en el buscón, donde por cierto hay buena poesía.
Hay que decir que el libro no es una antología, y yo no he encontrado ningún criterio que lo justifique. Ni por calidad, ni por tema, ni por corriente literaria, ni por inquietudes, etc. Lo de obligar a cada uno de ellos a escribir un "poema trece" ha quedado forzado y no ha dado ningún resultado positivo.
No hay ningún nexo entre los autores. Y me parece un esfuerzo más por crear o recrear una literatura extremeña que en realidad no existe.
Supongo que de entre ellos, los que tienen talento (manuel checa y victoria mera), se arrepentirán un poco en el futuro de haber publicado aquí por primera vez.
No hay que fomentar que los jóvenes escriban. Hay que fomentar que escriban bien. Y que lean mucho. Lo que no hay que hacer es mentirles.
un abrazo.
Espero que haya quedado claro que no es una antología, stricto senso, que no tiene pretensiones de corriente ni tendencia.
Hay que fomentar que los jóvenes y no tan jóvenes hagan deporte; lo de que lo hagan bien será cada día más frecuente; pero no sale todos los días un Induráin. Si a un chaval se le anima a montar en bicicleta y no gana ningún premio ni llega a nada, no se le está mintiendo.
Hola, Anónimo. Soy Santiago Tobar, responsable de la edición de TRECE. Agradezco tu sinceridad y asumo que, efectivamente (y en mi caso, al menos) si tuviera un sobrado talento me hubieran sobrado estos diez años para encontrar un hueco entre los autores y no ha sido así. Pensaré en ello antes de que se me vuelva a ocurrir publicar algo. Siento mucho tu decepción.
Un saludo
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