miércoles, marzo 28, 2007

Contra boicoteos


Cáceres, calle Venecia. Febrero de 1984. El individuo de la foto convivía con dos amigos, de derechas ambos. En aquella casa entraban El País y el ABC diariamente, de vez en cuando una palometa que se hacía al horno, filetes de babilla, lechugas y un amigo valenciano-americano al que le gustaba mucho tomarse tras la comida una copita de "Torres 10". Tiempos de tolerancia y de libertad; curiosa —cuando no inquietante— acronía.

3 comentarios:

e-catarsis dijo...

Hola, ya sabes que saltando de un lado a otro al final siempre se llega a algún lugar, bien, he llegado, y espero no perturbar nada pero me gustaría apuntar que no se cuida nada la semántica y que tal vez por esto se digan las barbaridades que se dicen, pero yo es que soy una persona optimista...

Una cosa más la palabra acronía no la entiendo, entiendo creo, el sentido que quieres dar a la frase pero me ha sido imposible encontrarla en el diccionario, yo invento palabras, bueno las modifico a mi gusto, igual tú has hecho lo mismo o simplemente mi diccionario es una castaña, si me puedes decir que significa exactamente...tengo curiosidad

Gracias, eh si puedes claro!!!

Miguel A. Lama dijo...

Según recoge el impresionante Diccionario del Español Actual de don Manuel Seco, 'acronía' es cualidad de 'ácrono', es decir, lo intemporal y acrónico, que es lo que yo quería sugerir por estar viviendo tiempos extraños que están siendo superados por aquellos que ya vivimos.
Yo conozco a gentes de otra generación que me hablaban de la lucha por las libertades, y que no disponían de ellas, que sufrían la censura. Ahora, parece al contrario. Más o menos.

e-catarsis dijo...

Gracias.

En mi opinión no poder decir nada o decir todo lo que te pone delante del morro sin más son dos tipos de agresión, desde luego parece que es más saludable la segunda pero no lo veo yo así, aunque claro ese punto de equilibrio ( que es pensar un poco antes...) al parecer es imposble.

Saludos y otra vez gracias