miércoles, diciembre 21, 2005

J. L. Alonso de Santos

Recibo de Marga Piñero y J. L. Alonso de Santos la versión teatral de éste de El Buscón de Quevedo, con un estudio preliminar de Marga. Es una versión estrenada en el Encuentro de Teatro Clásico de Valladolid en 2000, por una compañía vallisoletana, “La Quimera”, dirigida por Tomás Martín y Andrés Cienfuegos. Ahora sale publicada como separata de la revista Acotaciones (núm. 13), de la RESAD y Fundamentos.
Creo que es José Luis Alonso de Santos el autor vivo del que he visto y leído más obras. Teniendo en cuenta que soy un espectador de provincias y que su adaptación de La dama boba ha sido el único montaje al que he asistido en Madrid, esto es indicativo de su profusión y de su difusión. Porque en Cáceres, en Mérida (lo último, Yo, Claudio) o en el salón de mi casa por el televisor, he conocido muchas de sus obras.
No en vano un sabio del teatro como Ricardo Salvat dijo, y lo cita Marga Piñero en su estudio preliminar, que Alonso de Santos “debe de ser el único autor español, no buscadamente comercial, de la segunda mitad del siglo que, después de Buero Vallejo, ha visto representar prácticamente todas sus obras y también sus versiones.”
Guardo buenos recuerdos de sus dos estancias por mi culpa en Cáceres y de mi visita a su casa madrileña a propósito de un interés compartido sobre ese itinerario desde el manuscrito al escenario y del escenario al texto impreso.
Un grato reencuentro.