lunes, noviembre 28, 2005
Sobre la literatura
"La literatura se introduce en nuestras vidas de una forma insensible y progresiva, y no sólo va conformando el pensamiento, sino prestándonos sus propios ojos, es decir, proporcionándonos patrones con arreglo a los cuales mirar lo que pasa, escuchar lo que nos cuentan, adornar nuestros sueños e interpretar los hechos de la propia novela vivida." (Carmen Martín Gaite, de El cuento de nunca acabar, Barcelona, Anagrama, 1988, pág. 63).
jueves, noviembre 24, 2005
Julio Camba
"Para hacer mi artículo yo me encierro por las tardes en un cuarto con un poco de papel como, para hacer ota cosa, pudiera encerrarme en otro cuarto, con otro poco de papel. Allí comienzo a hacer esfuerzos y el artículo sale. Unas veces sale fácil, fluido, abundante; otras sale duro, difícil y escaso, pero siempre sale."
Lo publicó Julio Camba en La Tribuna, el 29 de mayo de 1913, "Cómo escribo los artículos", y lo cita como ejemplo José Antonio Llera en su excelente estudio El humor en la obra de Julio Camba. Lengua, estilo e intertextualidad, Madrid, Biblioteca Nueva y Diputación de Pontevedra, 2004. Escribe Llera que en este texto "hallamos una muestra de símil reticente, con alusión escatológica. El lector ha de restaurar la analogía —pre-daliniana, por cierto— que asimila la creación literaria a la defecación, analogía que permanece sobreentendida" (pág. 95).
Lo publicó Julio Camba en La Tribuna, el 29 de mayo de 1913, "Cómo escribo los artículos", y lo cita como ejemplo José Antonio Llera en su excelente estudio El humor en la obra de Julio Camba. Lengua, estilo e intertextualidad, Madrid, Biblioteca Nueva y Diputación de Pontevedra, 2004. Escribe Llera que en este texto "hallamos una muestra de símil reticente, con alusión escatológica. El lector ha de restaurar la analogía —pre-daliniana, por cierto— que asimila la creación literaria a la defecación, analogía que permanece sobreentendida" (pág. 95).
Match Point
Ayer vi la película de Woody Allen y salí del cine con una sensación extraña. ¿Acaso la boba fidelidad al autor me impide decir que no me gustó? No es tanto la fidelidad —y la amistad, añado, por los muchos momentos que hemos compartido—, sino la convicción de que un cineasta como él no desatiende la posibilidad de no gustar al público a propósito. Con perdón. Aun así, y tendremos que hablar más, el traslado de Nueva York a Londres, no tanto por el espacio, sino por sus habitantes, me provocó una sensación muy desagradable el día —por ayer— que leí que seis millones de menores de cinco años fallecen de hambre cada año, según informe de la FAO.
Editar a Unamuno (bis)
Parece que se han sobrepuesto las ediciones mencionadas abajo en mi apunte a una a la que le tengo especial apego: la edición con estudio preliminar de Bénédicte Vauthier —hoy en la Universidad de Lieja, hace unos años en la de Extremadura— de MANUAL DE QUIJOTISMO, CÓMO SE HACE UNA NOVELA y del epistolario Miguel de Unamuno/Jean Cassou (Salamanca, Ediciones Universidad de Salamanca, Biblioteca Unamuno, 29, 2005).
Lo del MANUAL es todo un acontecimiento, porque nunca se había presentado una transcripción íntegra del texto. Pero es que la edición de CÓMO SE HACE UNA NOVELA supone una sugerente relectura del género e intención de la obra. Y se añade el epistolario inédito como clave, en conjunto, para comprender un período no muy iluminado del periplo vital del escritor, el del exilio, no el del destierro, sino el del otro destierro, o sea, el del "descielo".
Interesantísimas las consideraciones de Bénédicte sobre CÓMO SE HACE UNA NOVELA en el epígrafe que titula "Cuaderno de bitácora". Reflejos, problemas genéricos, metaliteratura.
Lo del MANUAL es todo un acontecimiento, porque nunca se había presentado una transcripción íntegra del texto. Pero es que la edición de CÓMO SE HACE UNA NOVELA supone una sugerente relectura del género e intención de la obra. Y se añade el epistolario inédito como clave, en conjunto, para comprender un período no muy iluminado del periplo vital del escritor, el del exilio, no el del destierro, sino el del otro destierro, o sea, el del "descielo".
Interesantísimas las consideraciones de Bénédicte sobre CÓMO SE HACE UNA NOVELA en el epígrafe que titula "Cuaderno de bitácora". Reflejos, problemas genéricos, metaliteratura.
martes, noviembre 22, 2005
Editar a Unamuno
Más de seiscientas cincuenta páginas tiene la edición de Nelson Orringer de DEL SENTIMIENTO TRÁGICO DE LA VIDA EN LOS HOMBRES Y EN LOS PUEBLOS y TRATADO DEL AMOR DE DIOS (Madrid, Editorial Tecnos, 2005). Es la primera edición crítica de la obra de 1911-1912, y la primera vez que se publica el TRATADO que fue germen de DEL SENTIMIENTO TRÁGICO. Coincide el envío con el de una nueva edición de EN TORNO AL CASTICISMO (Madrid, Ediciones Cátedra, Letras Hispánicas, 582, 2005), elaborada por Jean-Claude Rabaté, autor de numerosos trabajos sobre don Miguel, y que tiene el valor añadido de unos apéndices con el prólogo a la edición de 1902, la reedición del epistolario entre Unamuno y Bataillon (1921-1930), y el prefacio de éste a la traducción francesa de EN TORNO AL CASTICISMO de 1923 (L'ESSENCE DE L'ESPAGNE).
Sobre "Hoy"
Mi texto publicado aquí bajo el título "Hoy" pretendía confesar un estado de ánimo al tiempo que se proponía como apunte sobre el sentido y contenidos de estos cuadernos de bitácora. Pero es la confesión de un estado de ánimo lo que me lleva ahora a precisarlo, o no. No por lo ambiguo o inconcreto, sino porque lo dicho puede ser interpretado casi unívocamente de otro modo, quiero iluminar —es un decir— mi propio texto con una tímida nota: mi tristeza de ese día vino provocada por un asunto, digamos, literario y profesional. Como un episodio bélico de autor a crítico. Así fue para mi desgracia. Nada más.
lunes, noviembre 21, 2005
Asperges de notas sobre la novela PARADOJA DEL INTERVENTOR (XIII)
La salida a una nueva realidad que cuenta la novela es la creación de una realidad nueva. El personaje, también, ha de buscarse, pues no sólo ha perdido el tren, sino que se ha extraviado de sí mismo (pág. 16), y por ello va transformándose, y de viajero pasa a ser forastero, el que viene de fuera. Se produce en este momento de la novela un movimiento más notorio, una representación de espacios más panorámica, que va del norte al sur y del sur al norte, de la estación a la ciudad, centro principal de su extravío.El espacio rodea al personaje, le aporta una nueva realidad, un referente. El viajero-forastero ha de dotarse de una nueva identidad, para la cual determinados complementos son esenciales: el chaquetón, el cuaderno negro, la botella verde... Son complementos identificativos que el lector puede seguir a lo largo del texto, pues acompañan al personaje, y que aparecen destacados al final.
Nueva realidad creada, ilusión, mito de la caverna... Gonzalo Hidalgo construye el relato a partir de un aluvión de significaciones y simbologías que comienzan ahora a operar y a instigar al lector. En ocasiones, con hallazgos como el efecto de la luz larga de los faros de un coche que proyecta una panorámica de los perfiles de la estación: vagones, letreros, barracones, la propia sombra del viajero contra la pared, y la oscuridad. Un efecto de enorme fuerza visual (y no será el único en la novela) que cumple una función análoga a los resúmenes reflexivos o paradas meditativas que a partir de este momento se suceden.
Nueva realidad creada, ilusión, mito de la caverna... Gonzalo Hidalgo construye el relato a partir de un aluvión de significaciones y simbologías que comienzan ahora a operar y a instigar al lector. En ocasiones, con hallazgos como el efecto de la luz larga de los faros de un coche que proyecta una panorámica de los perfiles de la estación: vagones, letreros, barracones, la propia sombra del viajero contra la pared, y la oscuridad. Un efecto de enorme fuerza visual (y no será el único en la novela) que cumple una función análoga a los resúmenes reflexivos o paradas meditativas que a partir de este momento se suceden.
Hoy
Hoy estoy triste. Alguien me ha hecho daño, injustamente. Una confesión así me lleva a pensar en los textos que leo en este medio, en los cuadernos de bitácora que a veces leo (lo siento, no tengo tiempo), en donde hay muchas confesiones de todo tipo. Casi ninguna como ésta.
Hoy he leído los textos de Daniel Casado. Me interesan, y me alegro de mucho de lo que dice. Pero estoy triste.
Hoy he leído los textos de Daniel Casado. Me interesan, y me alegro de mucho de lo que dice. Pero estoy triste.
martes, noviembre 15, 2005
Las vírgenes locas
Me divierte en clase hablarles de Las vírgenes locas (1886), aquel delirio novelesco que se le ocurrió a Sinesio Delgado, el director de MADRID CÓMICO y en el que implicó a autores como Jacinto Octavio Picón, José Ortega Munilla, Miguel Ramos Carrión, Enrique Segovia Rocaberti, Leopoldo Alas, Pedro Bofill, Vital Aza, José Estremera, Eduardo de Palacio, Luis Taboada... "Se trata de escribir y publicar en el MADRID CÓMICO una novela sin género ni plan determinado y de la cual cada capítulo ha de ser original de un autor diferente, que lo firmará y se retirará de la palestra sin cuidarse más del desarrollo del asunto ni de lo que harán los que le sigan." La travesura, bajo la cual hay un serio intento de reflexión sobre la novela y no poca crítica a los modos del folletín, se fue complicando y tuvo que ser Clarín quien reorientase el asunto.
Lengua de Trapo, en 1999, publicó una edición moderna de este curioso texto a once manos. EL PAÍS y otros periódicos se hicieron eco de esta novedad editorial como si fuese un descubrimiento. En enero de 2000, el profesor José Manuel González Herrán publicó una carta al director en EL PAÍS en la que matizaba que el tal descubrimiento tenía ya algunos años, pues en 1985 la editorial Júcar publicó Las vírgenes locas como apéndice de Cuesta abajo y otros relatos inconclusos, de Clarín, en edición de Laura Rivkin. Poseo recorte, como decía don Fernando Lázaro Carreter.
Lengua de Trapo, en 1999, publicó una edición moderna de este curioso texto a once manos. EL PAÍS y otros periódicos se hicieron eco de esta novedad editorial como si fuese un descubrimiento. En enero de 2000, el profesor José Manuel González Herrán publicó una carta al director en EL PAÍS en la que matizaba que el tal descubrimiento tenía ya algunos años, pues en 1985 la editorial Júcar publicó Las vírgenes locas como apéndice de Cuesta abajo y otros relatos inconclusos, de Clarín, en edición de Laura Rivkin. Poseo recorte, como decía don Fernando Lázaro Carreter.
domingo, noviembre 06, 2005
Lecturas dramatizadas
Hace unos días se presentó en Madrid el undécimo ciclo de Lecturas Dramatizadas de la SGAE, que se programa desde este mes de noviembre hasta mayo de 2006, cuando se cierra con la lectura de la obra ganadora del Premio Lope de Vega de 2005. En medio, obras de Gemma Rodríguez, que ya ha sido leída, Patricia Pardo, Rosa Molero, Inmaculada Alvear, Miguel Delibes, Suso de Toro, José Monleón, Carlos Toquero..., e Isidro Timón, el director del Gran Teatro de Cáceres, que participa con su obra MUNDOS el 23 de enero de 2006. No sé qué actores pondrán las voces a las palabras de Casiopeo y Neptuno, de Eva y de El Abuelo, personajes de la obra de Isidro, no importa, pero me agrada que estemos tan cerca de ese propósito de mostrar el estado de la dramaturgia española contemporánea. Nuevas voces.