martes, junio 22, 2010

Las moradas del verbo

En la nota de prensa que la editorial Calambur preparó para presentar esta antología celebrativa de los 100 números de su colección de poesía, la información referida a los criterios de la misma, la introducción del antólogo y su resumido curriculum vitae se cerraban con el teléfono de Ángel L. Prieto de Paula, responsable de la selección de autores, de la introducción mencionada y de la selección de poemas. Sí, el teléfono de Ángel L. Prieto de Paula. Al principio creí que la editorial ponía a disposición de todos el teléfono del antólogo para que los poetas seleccionados le diesen su opinión, le hiciesen llegar su agradecimiento, sus felicitaciones o sus reparos. O, quién sabe, si esos folios llegaban a las manos de los muchos poetas en activo no incluidos —nacidos, que ésa es el área cronológica de los alojados, entre 1954 y 1968—, que Ángel L. Prieto de Paula pudiese recibir llamadas intempestivas, amenazantes o razonablemente fundamentadas de aquellos. Luego me di cuenta de que era una nota para la prensa, para que los periodistas contasen con ese medio rápido y directo para entrevistar al antólogo. Un día de éstos le llamo, que para eso tengo su teléfono —desde hace muchos años, dicho sea de paso.
Las moradas del verbo. Poetas españoles de la democracia (Madrid, Calambur Editorial, 2010) es una excelente antología para conocer el panorama poético de la restauración democrática en España. El lector tendrá una representación importante en número, pues son treinta y dos (*) los poetas incluidos, y la selección de textos ilustra sobradamente la pluralidad de tendencias y actitudes estéticas referidas en el estudio introductorio, redactado con rigor y con el propósito de conjugar calidad y representatividad en el panorama. Aunque se anuncian otras antologías preparadas por Ángel L. Prieto de Paula —una de ellas, qué bien, de la poesía romántica—, para mí, la demostración de su saber compilador de una etapa histórica estuvo en la selección que preparó sobre Poetas españoles de los cincuenta (Salamanca, Ediciones Colegio de España, 1995). Espléndida. Al leer el estudio de Las moradas del verbo —y moradas del verso— me he acordado de aquella, por la ordenada filiación de las actitudes poéticas de los poetas españoles de la democracia entre 1979 —La lentitud de los bueyes de Julio Llamazares y Amenaza en la fiesta de Tomás Sánchez Santiago— y 2010, pues en esta antología se incluyen algunos textos inéditos de algunos nombres o de libros publicados este mismo año, como Nombres del árbol (Barcelona, Tusquets, 2010), de Antonio Moreno.
Realismo y experiencia son conceptos y palabras que ocupan el panorama de manera dominante —y "asfixiante para los otros", dice Prieto de Paula. Tanto es así que justifican el desarrollo analítico de sus contestaciones y variaciones. Irracionalismo iluminativo, carácter visionario, reflexión ontológica, esencialismo y poesía refleja, desnudez retórica, poesía reflexiva, meditativa, poesía del desconsuelo... son algunos de los apuntes taxonómicos que la aguda mirada de Prieto de Paula ofrece al lector para que éste vea mejor si se adentra en estas moradas de lo poético.

(*) Miguel Casado (1954), María Antonia Ortega (1954), Julio Llamazares (1955), Julio Martínez Mesanza (1955), Concha García (1956), Tomás Sánchez Santiago (1957), Juan Carlos Mestre (1957), Ángel Campos Pámpano (1957-2008), Luis García Montero (1958), Blanca Andreu (1959), Álvaro Valverde (1959), Felipe Benítez Reyes (1960), Carlos Marzal (1961), Aurora Luque (1962), Amalia Iglesias Serna (1962), Jorge Riechmann (1962), Amalia Bautista (1962), Manuel Vilas (1962), Miguel Ángel Velasco (1963), Vicente Gallego (1963), Vicente Valero (1963), José Mateos (1963), Antonio Moreno (1964), Juan Antonio González-Iglesias (1964), Álvaro García (1965), Ada Salas (1965), Luisa Castro (1966), Antonio Méndez Rubio (1967), José Luis Piquero (1967), Jordi Doce (1967), Lorenzo Oliván (1968), Enrique Falcón (1968).

3 comentarios:

  1. No sé si hará falta que les llamen los antologados, porque contó con ellos, me dijo (yo sí le llamé).

    Ahora sí: hay quien echa de menos a los que no están.

    Como yo no los conozco a todos, no echo de menos a nadie...

    ResponderEliminar
  2. Me alegra de que hayas sido una de las que hizo uso del teléfono para dar noticia de una importante novedad literaria. Yo sí conozco a algunos de los que no están, pero no los echo de menos, por respetar el criterio y el buen hacer de Ángel L. Prieto de Paula. Lo que me falta es espacio para decir algo más sobre la poesía de los incluidos, sobre lo que sugiere el estudio preliminar, sobre los autores extremeños incluidos: Álvaro Valverde, Antonio Méndez Rubio, Ada Salas y Ángel Campos Pámpano, que es el único que tiene dos fechas en la relación.
    Salud.

    ResponderEliminar
  3. Sí, de todos ellos hablamos en la entrevista. Más de Ángel. Y Prieto de Paula me dijo que estaba de acuerdo contigo... (creo que hablamos de tu prólogo también, pero ahora no recuerdo exactamente ese punto).

    ResponderEliminar