Me ha enviado Antonio Montesino este ejemplar de la revista que dirige, La Ortiga. Es un número doble (90-92) dedicado a Félix Grande. El ingenioso hidalgo extremeño de La Mancha, hecho al cuidado de Antonio, de Mary Roscales y de José Mediavilla, dentro de la serie Cuadernos del Solitario. Tiene un arranque flamenco con un poema tan inédito como agradecido, tan chisposo, de Félix, y un fragmento de un texto de Paco de Lucía que apareció en El País en diciembre de 2004, cuando Félix fue Premio Nacional de las Letras —donde publicó Alberto Oliart aquel día un artículo contundente sobre el error de José Mª Aznar en el 11-M—, en el que el genio de la guitarra puso: "es la persona más honesta, leal y buena que me he tropezado en mi vida". Después de esto, se organiza el homenaje en cinco partes: Textos del Reconocimiento 1, Textos del Conocimiento 1, Textos del Conocimiento 2, Universos Flamencos y Textos del Reconocimiento 2. De tal manera, los reconocimientos de los amigos y los más cercanos, desde José Hierro, Francisca Aguirre, Rafael Conte, Fernando Savater, Leopoldo de Luis, Guadalupe Grande, etc., arropan a los textos del propio Félix, en una amplia muestra de su poesía, de sus relatos, de sus artículos. "Universos Flamencos" incluye una entrevista de José María Polo, el de El Olivo, el prólogo que escribió Caballero Bonald a Memoria del flamenco de Félix en la edición de Selecciones Austral de 1979, y un texto muy ilustrativo sobre el arte del cante de Grande de 2008.
Por los nombres citados y algunas referencias, habrá deducido el lector que el homenaje está conformado por textos ya publicados. Pocos son, sí, los textos nuevos —el poema de Félix ya citado, un potente texto sobre el tiempo y el acabamiento, y la vejez, y todo, algún otro, y el cuestionario Proust con Chemi Corrales—; lo que, lejos de desmerecer el número, le añade valor, por la extraordinaria selección, por el trabajo que conlleva, por el gran retrato que de Félix se tiene con estas páginas. Entre los textos antiguos, se ha recuperado una antigua entrevista de 1993 que Ángel Campos Pámpano hizo a Félix Grande y que se publicó en un suplemento del diario HOY, donde Ángel coordinó varios números sobre autores de Extremadura. Yo recuerdo aquella entrevista porque subrayé la alusión de Félix a que, en poesía, la facilidad, el buen oído y la originalidad son asuntos triviales. Razón tenía y tiene. Y este presente me mueve a ponderar el sobresaliente homenaje en vida que Félix Grande ha recibido. Ay.
Conozco a Félix Grande. Hemos estado varias veces juntos, en Madrid, en el Puerto de Santa María, en Badajoz y en Cáceres; pero nunca, salvo en la lectura de sus textos, había estado tanto tiempo seguido con él ni tan cerca.
No hay comentarios:
Publicar un comentario