Hoy he disfrutado nuevamente con el espléndido programa de entrevistas que es Siluetas, en Radio Nacional. El equipo de Manuel Ventero se ha desplazado a la casa de la periodista Pilar Narvión (Alcañiz, 1922). Está enferma. Tiene un mieloma múltiple —“estoy podrida”, dice, “de algo hay que morir”— y 86 años —ella dice que tiene 87—, y esa contundencia al hablar que no ha perdido me ha recordado su palabra cuando la conocí gracias a la televisión de la época de la transición. A aquella época, supongo que al año 1977, pertenece la fotografía que tomo prestada del blog de su sobrino Javier Capitán y en la que sonríe junto a Dolores Ibárruri, La Pasionaria. Su sobrino, Javier, ilustró con ella una entrada sobre la presentación del libro de Juan Carlos Soriano, otro de Radio Nacional, Pilar Narvión. Andanzas de una periodista perezosa (Teruel, Tirwal, 2008).
Qué importante es escuchar a personas con tanta experiencia y sabiduría. Qué documento ejemplar una voz así, que rompe, potente, con la habitual templanza de las que pasan por el programa. Qué maravilla.
Pilar Narvión no necesita tener tantos años para cachondearse de aquella chica que proclamaba que había perdido la virginidad en las barricadas del mayo del 68. —¿En qué virginidad has perdido tú las barricadas? —ha dicho en un lapsus genial esta tarde esta mujer que admira “al Nadal” y no al “otro, al asturiano, un tío tieso...; ahora, el Nadal.... Tener un hijo así tiene que ser una gozada.” Qué bien ha sabido Manuel Ventero llevar una conversación con alguien que no puede estar callada, que hace de un comentario sobre lo intrascendente una declaración sobre lo que tiene importancia. “La radio es la información, la prensa escrita es la opinión”, ha dicho, al lado de la explicación sobre por qué se ha hecho siempre el moño. Y qué acierto cerrar el programa a micrófono abierto.
Lo dicho, una gozada.
Interesante mujer según tu entrada. No la conocía. Buscaré sobre ella.
ResponderEliminar¿Y por qué se hacía siempre el moño? Estoy intrigada.
Saludos.
Al parecer, ella llevaba siempre el pelo suelto y siempre parecía desarreglada. Alguien le dijo que una manera de despreocuparse del peinado de todos los días y no parecer desarreglada era hacerse el moño. Esta sosez, contada por ella, tiene su gracia.
ResponderEliminarUn saludo.
A mi tambien me gusta Siluetas,y escuche ayer la entrevista a P.N. Que lio se hizo con los generos literarios...
ResponderEliminarAyer,camino de Zaragoza, escuchábamos una entrevista y la voz de la entrevistada nos resultaba conocida. ¿Quién será? dijo mi madre. Me suena tanto....
ResponderEliminarComo la habíamos cogido empezada hasta un rato después no supimos que se trataba de Pilar Narvión y entonces, sí, entonces la recordamos bien. Pero, en todo momento, mientras la escuchábamos hablar nos dimos cuenta de que fuerza tiene, con que rotuntidad hablaba, que claridad en la expresión, cómo modula la voz. Sí, tiene un montón de años y una mala enfermedad, pero su cabeza sigue estupenda.
Precisamente por lo que me impresionó escuchar la entrevista hoy he venido buscando algo sobre su vida y es por esa razón que, de momento,estoy aqui dejando mi comentario.
Un saludo
Alicia
completamente emocionada y completa y absolutamente de acuerdo con el comentario de miguel a. lama de "qué acierto cerrar el programa a micrófono abierto", qué fantástica gran persona, qué lucidez, qué sabiduría y qué enseñanza de naturalidad y profundidad de la vida. ME EMOCIONO el programa. UN SALUDO A TODOS Y GRACIAS.
ResponderEliminar"alguien que hace de un comentario sobre lo intrascendente una declaración sobre lo que tiene importancia". Esta frase refleja muy bien, en mi opinión, a las personas mayores que, a pesar de no haber estudiado, la vida les ha otorgado la sabiduría. Qué diferente sería el mundo si escuchásemos a esas personas...
ResponderEliminarAquí puede escucharse la entrevista:
ResponderEliminarhttp://www.rtve.es/mediateca/audios/20081108/narvion-testigo-nuestra-historia-siluetas/334827.shtml
Es una maravilla volver a escucharla.
Hacía más de quince años que no sabía nada de mi paisana, una periodista que hablaba con un desaparpajo fuera de lo común y una socarronería buñuelesca. Grracias por el "enlace"
ResponderEliminarRepito mi mensaje y con gusto: la entrevista es magnífica. He disfrutado. Gracias por tu sugerencia, hermano.
ResponderEliminarjosemarialama