Quizá ocupe el espacio de que dispongo con una justificación y una explicación sobre esta obra: El desierto de Takla Makán, de Gonzalo Hidalgo Bayal (Mérida, Editora Regional de Extremadura, 2007). La explicación es referida a su título. No sé qué puede resultar más extraño, más críptico o más necesitado de aclaración. Si el título, El desierto de Takla Makán, o el subtítulo, Lecturas de Ferlosio. Y es que quiero justificarme por seleccionar esta obra que no es para todos los públicos.
Lo que me pide el cuerpo es que el público se atreva con estas cosas, y que disfrute. Yo reconozco que estas lecturas de Ferlosio pueden resultar de difícil deglución. Uno puede siempre leer directamente a Ferlosio, o disfrutar también, antes de leer a Gonzalo Hidalgo en sus ensayos, hacerlo con sus novelas, especialmente con la última.
Me refiero a esa espléndida obra que se publicó aquí en Extremadura por primera vez, Paradoja del interventor, que salió en Del Oeste Ediciones en 2004, y que luego, por arte de que cayó en manos de lectores con voz y con voto en los grandes medios, la reeditó Tusquets en su conocida colección Andanzas. Claro, se dieron cuenta de que era buena.
Estoy seguro de que, por muy grave y sesudo que sea Ferlosio para según qué lectores, o por muy impenetrable para algunos, caerá bien conocerle a través de la buena prosa y de la agudeza de Gonzalo Hidalgo, como cuando nos cuenta que Ferlosio no es un teórico de su propia escritura, que no se mira mucho a sí mismo, y que puede más el objeto que el sujeto, puede más que el “Conócete a ti mismo” de Sócrates su “Antisócrates”, que viene a decir:
“¡Sí, hombre, como si no tuviera uno otra cosa en que pensar!”.
Por cierto, el desierto de Takla Makán está en China y es inmenso, tanto, que significa “si entras, no saldrás”. Como le ha pasado a Gonzalo Hidalgo con Ferlosio desde que entró en él para leerlo. Nunca he animado a nadie a adentrarse en un desierto así. Es la primera vez; y lo hago con muchas ganas.
Del martes 27 de noviembre.
Y además en el octogésimo aniversario de su nacimiento. Del de Ferlosio, digo, que creo que Gonzalo Hidalgo es bastante más joven.
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