lunes, julio 05, 2021

La cultura contemporánea

Decía que mi coche duerme cerca de donde vivo, o que está cerca de donde duermo. Donde mi coche hay tres plantas de panteones para cuatro ruedas en ángulos insólitos, en ubicaciones a veces inverosímiles. Hay muchas plazas para los que no somos vecinos del inmueble, y unas pocas hay también que son propiedad de hoteles próximos que las ofrecen a sus clientes. Con ellos me encuentro casi a diario, cuando entran o salen del garaje. Si entran, les abro sin que tengan que marcar el código que traen en el papelín que sacan; y si salen, hay veces que no saben que la estrecha portezuela nos lleva a todos a la calle; y es cuando les ayudo y sostengo esa puerta para que salgan con sus maletas, como si les diese la bienvenida a Cáceres, un gesto que siempre reciben bien. Si algún día pongo un bar en esta ciudad, se llamará «La cultura contemporánea». Ya me imagino las grandes y elegantes letras en la fachada: LA CULTURA CONTEMPORÁNEA. Como esto es una estupidez improbable, dejo aquí el comentario por si alguien que tenga posibilidades de abrir un negocio así, un bar que no tenga por qué tener relación con la cultura, le ponga ese nombre. Lo ideal sería que se hiciese famoso por un servicio exquisito, unos baños impolutos y la calidad de sus tapas. No sé, unos callos para chuparse los dedos. Luego, igual a alguien se le ocurre utilizar el espacio para presentar un libro o para colgar en las paredes las obras de algún artista. Pero esta tarde se me ha ocurrido que estaría bien que en la ciudad en la que vivo podría haber un bar más al que acudir y llamarlo «La cultura contemporánea». De estar bien, sería, además, singular, curioso. Quizá algún día termine de escribir un texto que tengo titulado «Tú y yo» —o «Yo y tú», pues todavía dudo— sobre el mito de Narciso, como el Luis de Baviera de Cernuda «Se inclina y se contempla en la corriente / Melodiosa e, imagen ajenada, su remedio espera / Al trastorno profundo que dentro de sí siente». En mi bar quisiera versos así, cerveza fresca y callos exquisitos.

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